Los mochufas llegan al teatro

23/12/2020

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  • Los asquerosos, un libro de Santiago Lorenzo que en el confinamiento se convirtió en un ‘must’ que nos recomendaron muchos artistas, viaja al escenario en versión de Jordi Galcerán y dirigido por David Serrano.

los asquerosos colonizan las tablas

Ha sido “un regalito de fin de año” para Serrano, que confiesa es la primera vez que dirige por encargo (“generalmente sólo dirijo obras que yo propongo”, explica).

Al director madrileño le parecía “misión imposible” que un texto teatral pudiera reproducir el “único e irrepetible” lenguaje de Lorenzo, lleno de “términos en desuso y palabras y construcciones inventadas”, y felicita a Galcerán y Jaume Buixó por el “trabajo de orfebres” que han realizado y que también ha sorprendido gratamente al novelista, que califica la adaptación de “prodigiosa” y “excepcional”.

UN CRUSOE EN LA ESPAÑA VACIADA
Con mucho de autobiografía, Los asquerosos es la cuarta novela de Lorenzo, que desde hace años vive apartado del mundanal ruido en una aldea segoviana. De ahí que diga que esta historia “va de austeridad como opción personal”, y que uno de sus protagonistas, Manuel, encuentre la felicidad sobreviviendo con lo mínimo en el pueblo abandonado donde se oculta tras un encontronazo casual con un policía antidisturbios al que ha herido con un destornillador.

Para Serrano, Manuel es “un antihéroe, un perdedor. Un hombre solitario y en crisis, al que le cuesta horrores hacer amigos, encontrar trabajo y echarse novia, pero al que la vida termina sonriendo” al situarle en este paraje deshabitado. Y es que allí, rodeado de tranquilidad, asilvestrado y libre, Manuel encuentra la paz y relata por teléfono sus experiencias a su tío: desde el miedo inicial a perder la libertad, al descubrimiento de la felicidad de la vida solitaria. Pero “su paraíso” se echa a perder cuando una familia de urbanitas, a los que despectivamente denomina “mochufas”, se instala en otra casa abandonada del pueblo.

Con una puesta en escena llena de “guiños” al autor, Miguel Rellán y Secun de la Rosa dan vida a tío y sobrino, una “pareja de inadaptados” que harán las delicias de todos, mientras nos invitan a buscar nuestro propio camino para ser felices.

Serrano, “amigo personal” de ambos actores, no dudó en que ellos interpretaran los papeles. “Les van maravillosamente bien”, afirma el director. Y aunque Lorenzo describe a Manuel como “un veinteañero”, decidió que el de su función fuera “un cuarentón que no sabe qué hacer con su vida”. Además, en la versión teatral el personaje de Rellán es “algo más estrafalario” que el de la novela.