Crítica «Amistad»

Este fin de semana visitaba el espacio cultural Rambleta de Valencia, la obra Amistad, con texto de Juan Mayorga y dirigida y protagonizada por José Luis García-Pérez, en compañía de Ginés García Millán y Daniel Albaladejo.

El montaje levantado por Octubre Producciones y García-Pérez Producciones es ese tipo de obras que te hacen sentir que estás viendo teatro, que te recuerdan (por si en algún hipotético caso se te había olvidado), el porqué es tan necesario y tan diferente este arte… Y es que Amistad es teatro puro, es ese tipo de espectáculo que te hace sonreír inconscientemente al escuchar ese tono teatral tan hermoso de sus intérpretes, es también esa clase de obra que girando alrededor de un tema tan sumamente importante y universal como es la amistad y sus diferentes formas, te envuelve con su halo escénico y te sumerge en un universo diferente. En ese mundo tan mágico llamado teatro.

Pero conseguir toda esta magia no es fácil, por eso, de cautivarnos con su carisma y personalidad teatral, se encargan tres intérpretes con una conexión tan evidente que te hacer plantear la duda de si hubiera sido posible leer este montaje con otros actores… Algo que me parece poco probable, porque José Luis García-Pérez no solo brilla con su ironía y carisma escénica, sino que también lo hace como capitán de este barco en el que Juan Mayorga ha puesto la dramaturgia para que Ginés García Millán, un actor al que nunca me canso de ver actuar, e incluso me atrevería a asegurar de cara a un futuro, que nunca me cansaré de verlo ya sea a través de la pantalla o por suerte, sobre las tablas, y a Daniel Albaladejo, mi bonito descubrimiento teatral de la jornada. Los tres juegan, se complementan, se retan y sobre todo, se divierten dando paso en ciertos momentos incluso a romper la cuarta pared. Algo que el público sentimos y agradecemos.

Y es que, al final, Amistad es eso, es el posible reflejo de las diferentes relaciones que tenemos con nuestros amigos. Es también ese vinculo que mantenemos con aquellos con quienes muchas veces no sabemos si siguen en nuestras vidas por rutina y por mantener esa conexión (a veces autobligada), o bien porque realmente sois almas que pase lo que pase, estaréis juntas.

Y por todo esto y por aquellos detalles que por más que lo intente, no puedo transmitiros a través de las palabras de un texto, yo solo puedo recomendaros que aprovechéis si tenéis la ocasión de disfrutar de estos tres actores sobre las tablas, para reír y replantearos ciertas cosas a su lado, tal y como hizo ayer el público de Rambleta, que los hizo salir a escena hasta en cuatro ocasiones sin cesar de aplaudir.